Un día, hace muchos años, la virgen Milagrosa se le apareció a Sta. Catalina, una hija de la caridad, y la mandó hacer una medalla para que nos protegiese a todos nosotros.
En el cole nos han regalado a cada uno de nosotros una medallita para que estemos protegidos y nosotros hemos subido a la capilla a cantarle a la Virgen.